(NO SE ME OCURRE TITULO)

Los días pasan demasiado rápido, o quizás sea que mis trayectos son muy largos y eso hace mis días bastante cortos...

Ayer fue una niña de 13 años abusada por su padrastro.

Y casi no fui capaz de mirarla a los ojos. La veía tan chiquita, como un pajarito, pensaba en el asco que debería haber sentido, y como que me dio rabia su madre,

¿¿en que estaba que se le ocurrió meter a ese hombre a la casa???

De pronto agradecí a mi mamá, que después de haberse separado de mi papá, haya dicho que nunca más, al menos mientras fuéramos chicos, iba a permitir que un extraño viviera en la casa. Que uno nunca sabe.

Ella siempre fue súper desconfiada, no me dejaba ir a jugar a la casa de mis amigas si en ella estaba sólo el papá, un tío o un hermano, y eso que antes tanto me enojaba, hoy me alegra.Creo que seré igual con la Conny chica. Uno nunca sabe.

Va tanta mujer abusada sexualmente, que de pronto el maltrato se vuelve casi anecdótico.

Pienso en como reparar tanto, pero tanto daño.

También llego una señora, a quien el marido le desvió la nariz de un puro cachuchazo.

A veces, cuando voy camino a casa, me pregunto si en algún momento, me dejará de impresionar el maltrato y la violencia. Pese a lo común que es, pese a la naturalidad con la que se habla de eso, pese a que casi todo mi día gira en función de aquello.

Espero que no.