17 de agosto de 2005

Eternamente en fuga...

Me volvere la hoguera que sabe arder siempre... Echare a ella mis semillas,y de pronto vere su entraña semajante a pájaro. Impetuosa,armada solo con mis huesos,con mis ojos mezcla de niña pequeña y vieja carcomida por la experiencia... Sere yo misma que salgo hacia la torre, contando mis inseguridades y temores... Sere yo misma tratando de escapar de las ruedas rechinantes... Yo misma agrandada,difundida,despojada de la sangre turbulenta... De nuevo en calma,sin lágrimas,con todo mi aliento y hasta donde pudiera alcanzar mi alma...con los ojos desorbitados por la resurrección Me buscare entre los que ya no estan con gritos agudos, Bailare entre lo pálidos mudos... La soledad no enloquece,la soledad no mata;va ahondando en el alma como un cuerpo de plomo en una tembladera infinita... Asombrada escucho en las noches el eco de mi voz que busca aguardando una respuesta.La negra verdad me hiere con saña... Me pesan las sienes como si las oprimieran los dedos de un gigante... Estoy triste,como una paloma a quien la tormenta sorprende sola y lejos de su nido... Hoy no quise ser cotidiana...un regalo para tí Fernando,gracias por transformarte de pronto en la palabra precisa...

2 comentarios:

Roberto Valle Fuentes dijo...

Yano soy la palabra precisa... ni la mirada constante???

Conny dijo...

Aun lo eres...lo que pasa es que has estado ocupado con tus labores de amante padre y fiel esposo,pero aun tienes la titularidad...